Las relaciones interpersonales, ya sean de pareja, familia o trabajo, reflejan nuestras dinámicas internas.
A menudo, cuando hay algo que sanar dentro de nosotros, lo proyectamos en nuestros vínculos. La terapia nos ofrece la oportunidad de reparar esas relaciones desde adentro.
Trabajar en terapia te permite ser más consciente de tus reacciones, tus patrones y tus expectativas. Esto es vital para sanar las relaciones con los demás, porque la transformación comienza en ti.